Percepción táctil, kinestésica y háptica
Tradicionalmente se ha diferenciado entre tres modos de procesar la información sobre objetos y patrones realzados aprehendida a través del sentido del tacto. Estos tres modos son: Percepción táctil, kinestésica y háptica.
La percepción táctil hace referencia a la información adquirida exclusivamente a través del sentido cutáneo, cuando el perceptor adopta una postura estática que se mantiene a lo largo de todo el tiempo que dura el procesamiento de la estimulación.
La percepción kinestésica se refiere a la información proporcionada por los músculos y tendones. Ejemplos de este tipo de percepción son aquellos en los que se ha eliminado cualquier información adquirida a través del sentido cutáneo mediante anestesia, o cuando se cubre el dedo o la mano con algún tipo de material que impide que las sensaciones adquiridas a través de la piel sean captadas por el sujeto.
Finalmente, se habla de percepción háptica cuando ambos componentes, el táctil y el kinestésico, se combinan para proporcionar al perceptor información válida acerca de los objetos del mundo. Esta es la forma habitual de percibir los objetos de nuestro entorno cuando utilizamos el sentido del tacto de una manera propositiva, esto es, de forma activa y voluntaria. Limitaremos, por tanto, la definición de percepción háptica a la percepción de la información obtenida exclusivamente a través del uso activo de manos y dedos, excluyendo toda receptividad pasiva de la estimulación suministrada directamente en la mano del perceptor (Gibson, 1966; Katz, 1925; Loomis y Lederman, 1986).
Soledad BALLESTEROS
Departamento de Psicología Básica. Universidad Nacional de Educación a Distancia
Publicado en Psicothema
1993. Vol. 5, nº 2, pp. 311-321Fuente: http://www.psicothema.com