Acerca de la Imitación II – Las Neuronas Espejo
“Cuando los niños ven programas de tv violentos, las neuronas espejo, se activan. Las probabilidades de conductas agresivas aumentan”
Media Psychology, Edición de Enero Foto: EDH
En un caluroso día de verano, hace 15 años en Parma, Italia, un mono estaba sentado en una silla especial de laboratorio, esperando que los investigadores regresaran de almorzar.
Delgados cables habían sido implantados en la región de su cerebro utilizada para planear y llevar a cabo movimientos. Cada vez que el mono cogía y movía un objeto, algunas células en esa región del cerebro se activaban, y un aparato registraba un sonido: brrrrrip, brrrrrip, brrrrrip…
Un estudiante diplomado entró al laboratorio con un cono de helado de crema en la mano. El mono lo miró. Luego, ocurrió algo sorprendente: cuando el estudiante se llevó el barquillo a la boca, el aparato sonó, a pesar de que el mono no se había movido, sino que solamente había observado al estudiante tomar el helado y llevárselo a la boca.
Los investigadores, encabezados por Giacomo Rizzolatti, neurólogo de la Universidad de Parma, habían notado antes el mismo extraño fenómeno con cacahuates. “Nos tomó varios años creer lo que veíamos”, comentó Rizzolatti en una reciente entrevista. El cerebro del mono contiene una clase especial de células, llamadas neuronas espejo, que se activan cuando el animal ve o escucha una acción y cuando él mismo lleva a cabo la misma acción.
Sin embargo, si estos hallazgos, publicados en 1996, sorprendieron a la mayoría de los científicos, las investigaciones recientes los han dejado anonadados.
Resulta que los humanos tienen neuronas espejo que son mucho más inteligentes, más flexibles y más altamente evolucionadas que cualquiera encontrada en los monos, un hecho que, según los científicos, refleja la evolución de las complejas habilidades sociales de los humanos.
¿Imitación?
El cerebro humano tiene múltiples sistemas de neuronas espejos que se especializan en llevar a cabo y entender no solamente las acciones de otros, sino sus intenciones, el significado social de su conducta y sus emociones. Este descubrimiento está sacudiendo muchas disciplinas científicas, cambiando el entendimiento de la cultura, la empatía, la filosofía, el lenguaje, la imitación, el autismo y la psicoterapia. Asimismo, las experiencias cotidianas aparecen bajo una nueva luz.
Las neuronas espejo revelan cómo aprenden los niños, por qué las personas responden a ciertos tipos de deportes, bailes música y arte, por qué ver la violencia en los medios de comunicación podría ser perjudicial, y por qué a muchos hombres les gusta la pornografía.
Plantillas
Las neuronas espejo se activan en respuesta a cadenas de acciones ligadas a intenciones. “Cuando me ves llevar a cabo una acción, como recoger una pelota de béisbol , automáticamente simulas la acción en tu cerebro”, señaló el doctor Marco Iacoboni, neurólogo de la Universidad de California en Los Ángeles, quien estudia las neuronas espejo.
“Los circuitos en tu cerebro, que todavía no entendemos totalmente, te inhiben para que no te muevas mientras simulas”, explicó. “Pero entiendes mi acción porque tienes en tu cerebro una plantilla para esa acción, basada en tus propios movimientos. “Cuando me ves echar el brazo hacia atrás, como para arrojar la pelota, tienes también en tu cerebro una copia de lo que estoy haciendo, y te ayuda a entender mi objetivo. Debido a las neuronas espejo, puedes leer mis intenciones…”
Agregó que, “y si me ves asfixiarme, con ansiedad emocional por fallar en la base, las neuronas espejo en tu cerebro simulan mi angustia Automáticamente sientes simpatía por mí. Sabes cómo me siento…”
Algunos investigadores creen que el autismo podría implicar neuronas espejo rotas. Un estudio publicado el 6 de enero en Nature Neuroscience, por Mirella Dapretto, neuróloga de la UCLA, halló que, aunque muchas personas con autismo pueden identificar una expresión emocional, como la tristeza, en el rostro de otra persona, o imitar un aspecto triste con su propio rostro, no sienten el significado emocional de la emoción imitada. Al observar a otras personas, no saben cómo se siente estar triste, furioso, disgustado o sorprendido.
Las neuronas espejo ofrecen pistas acerca de cómo aprenden los niños: se activan al nacer. El doctor Andrew Meltzoff, de la Universidad de Washington, ha publicado estudios que demuestra que los infantes les enseñan la lengua a los adultos que hacen lo mismo.
En la vida real
Las emociones sociales como la culpa, la vergüenza, el orgullo, la ofuscación, el disgusto y el deseo se basan en un sistema exclusivamente humano de neuronas espejo que se encuentra en una parte del cerebro llamada la ínsula, precisó el doctor Christian Keysers, quien estudia las bases neurales de la empatía en la Universidad de Groningen, en Holanda.
Fuente: Sandra Blakeslee, El Diario de Hoy, El Salvador.